Gaceta

Por: Raúl Terrazas Barraza

*Inexplicable consulta

Total, se hizo, uno de los requisitos para la tan llevada y traída revocación de mandato podrá llevarse a cabo porque las firmas revisadas por el INE para comprobar su autenticidad fueron en la cantidad establecida en la Legislación, es decir, el tres por ciento del listado nominal que equivale a dos millones 758 mil de ellas.

Ahora solo falta que la institución encargada de este cuento pueda hacer la chamba dado que o contaba con los recursos necesarios para ello y los que despachan en las oficinas del gobierno de la República quieren que se haga con los sueldos de los funcionarios del INE.

Con las firmas completas, el INE puede dar el segundo paso, que es emitir la convocatoria para que los mexicanos se enteren a partir de los primeros días de febrero, que, en la segunda semana de abril, se lleva a cabo la consulta para ver si están de acuerdo con que el presidente de la República, Don Andrés López Obrador se quede en su cargo o que se vaya.

En realidad, la gran mayoría de los mexicanos todavía no encuentra la explicación convincente para que haya la consulta para la revocación del mandato presidencial, los más opinan que es un gasto innecesario que el titular del Poder Ejecutivo Federal quiere para satisfacer su ego y demostrar a sus adversarios que todavía las puede en las urnas a pesar de que ha hecho infinidad de cosas que molestan a los habitantes de la nación.

En las seis entidades que tienen elecciones locales para cambiar de Gobernador, como es el caso de Tamaulipas, la asistencia a las urnas será en dos ocasiones en un periodo muy corto, porque será el 10 de abril y otra vez tendrán que asistir el cinco de junio para votar a fin de elegir otra persona que despache en el Poder Ejecutivo Estatal.

Respecto al asunto de las firmas, la secretaría Ejecutiva del INE debe presentar un informe al Consejo General para que este emita un dictamen a partir de la información que entregue el Registro Federal de Electores, con el cual confirme que los requisitos constitucionales para la revocación de mandato se cumplieron, porque hubo las firmas suficientes para ello.

Por donde quiera que se vea, el afán del presidente López Obrador de someter al INE a sus designios ha causado una serie de líos que solo conducen al desgaste tanto de la figura presidencial como de la institución encargada de los procesos electorales y si ya se tiene la cantidad de firmas necesarias para la realización de la consulta sobre la revocación de mandato, las discrepancias financieras que haya deben de superarse, en el entendido de que cada semana que pasa uno gana y otro pierde.

Desde luego a manera de carrera de resistencia, el INE comienza a ganar terreno, porque los responsables de Gobierno Federal entran a una circunstancia que les coloca más cerca de la conclusión de sus funciones al acortarse el tiempo para el ejercicio del poder que tiene Don Andrés López Obrador.

Por lo pronto, el Consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello tiene que hacer un ejercicio mayúsculo, de esos que en el campo equivalen a tragar de lo peor sin hacer gestos, porque deberá de transferir recursos del Instituto de algunas áreas para sacar adelante la inexplicable e innecesaria consulta que a como de lugar quieren los regeneracionistas para demostrarse a si mismos y a sus seguidores que las pueden en todos los sentidos.

Los otros.

Con unas modificaciones realizadas por los Diputados al Código Municipal de Tamaulipas, se autorizó que además del Informe sobre el estado que guarda la administración del Ayuntamiento, también los integrantes del cuerpo edilicio, es decir, Síndicos y Regidores, rindan un informe anual de las actividades y la gestión que hayan realizado, de manera que, informar a la sociedad deje de ser una tarea propia del Alcalde.

Cada uno su cuento, pero, de informe municipal se pasará a informitis en los Ayuntamientos y eso, en pesos y centavos significará que deban de destinarse recursos para crear los escenarios en los cuales los miembros del Cabildo hagan su reporte anual.

En el caso de Ciudad Victoria, serán dos informes de Síndicos, el de Karina Sánchez de León y Ernesto Avalos Bustos y 21 de Regidores, más el del Alcalde, serán 24 informes al año que deberán realizarse porque fueron autorizados por el Congreso del Estado en la primera sesión ordinaria de este segundo periodo del año legislativo que corre.

Entre otros darán Informe, Alejandro Ceniceros Martínez, quien es el segundo Regidor, el sexto Julio Isay Yépez Martínez, el décimo Iván Saldaña Magaña, la 14 Guadalupe Perea Almanza, el 15 Carlos Cabrera Bermúdez, la 20 y exdiputada local plurinominal Isis Cantú Manzano y el 21 que es Horacio Reyna de la Garza.

Todos los municipios grandes de la entidad que son 12 tienen más de 20 síndicos y regidores, que equivalen a 240, por tanto, serán igual número de informes que se llevarán a cabo en el mes de septiembre que viene con la aprobación de las modificaciones al Código Municipal que pronto entrarán en vigor, al publicarse en el Periódico Oficial del Estado de Tamaulipas.

Por cierto, el último Informe del actual Gobernador de Tamaulipas será en el ya cercano mes de marzo, como lo establece la Legislación, misma que se cambió a fines del 2020, porque ya a principios del 2021 se realizó el quinto informe, así que el sexto será pronto y la terminación del sexenio será menos ruidosa en cuánto a actividades gubernamentales.