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Gaceta

Por: Raúl Terrazas Barraza

Día del Maestro

Es el Día del Maestro es una fecha icónica en el país, desde el momento mismo en que, el Presidente de la República, Venustiano Carranza Garza decretó que el 15 de mayo se celebraría en el país este día con la finalidad de honrar a quienes tenían a su cargo y la tuvieran en de los tiempos, aunque la primera celebración en 1918, por tanto, son 104 años de festejarla.

Por muchos años, quizá más de 80, las profesoras y profesores fueron personas muy importantes en la sociedad y se estima que, en las últimas dos décadas, aunque todo aquello que hagan cuenta en la formación de las personas y de las comunidades, la conmemoración del Día del Maestros fue tornándose light a lo mejor porque la relevancia del profesorado se redujo por el crecimiento de las ciudades y ya no alcanzaba a verse el gran trabajo social de los educadores.

Desde luego la evolución favorable de la población está a la vista de todos porque el nivel educativo de los mexicanos, si bien no es el deseable, porque apenas supera al de secundaria, cuándo debería de estar en el de preparatoria, situación que implica la dedicación de los trabajadores de la educación para cumplir con la parte que les toca en la formación de las generaciones de mexicanas y mexicanos.

Fue este tipo de pandemia, cuándo la sociedad revaloró el trabajo de los profesores, ya que, al suspenderse las clases presenciales como medida para evitar contagios y en atención a los protocolos ditados por las autoridades de salud, los alumnos debieron de quedarse por dos años para estudiar en sus casas a través de la Internet o de las plataformas que fueron creadas a exprofesor para ello, así que, los padres de familia vieron de nuevo el importante papel que tienen los profesores en la comunidad.

No era sencillo pensar en que, los padres de familia pudieran aguantar muchos meses con sus hijos en casa, mientras la escuelas permanecían cerradas como medida sanitaria y que, de pronto los pasos de las maestras y los maestros no enfilaran hacia las escuelas, sino que, también desde sus hogares debieron de asumir la realización de los programas educativos para cada nivel escolar y responder por las calificaciones y la preparación de las y los jóvenes.

Este 15 de mayo, ya con casi la generalidad de los maestros en las aulas, el ciclo escolar 2021-2022, debe calificarse en el terreno de la realidad como híbrido, ya que, desde antes de las vacaciones de Semana Santa, una buena parte de las Escuelas abrieron sus puertas para recibir, con todas las medidas sanitarias a los alumnos y desde luego, éstos a sentir el poder de atracción de las aulas para centrarse en el aprendizaje.

A decir de directivos de las escuelas de los tres niveles, primaria, secundaria y preparatoria, más del 90 por ciento la población escolar inscrita dijo sentirse más a gusto en la escuela que en sus clases en línea y en casa, en el entendido también de que se observa una mejoría marcada en las calificaciones de los alumnos.

Algo parecido debe suceder con las maestras y maestros, porque estar de nuevo en sus centros de trabajo debe tener un efecto positivo, pese a que se habían acostumbrado a trabajar desde casa y se supone que lo hicieron bien. De cierta forma se habla de alguna resistencia de algunos maestros, obvio, un porcentaje muy reducido, que ya n o querían acudir a las aulas, sino hasta el ciclo escolar próximo, pero, al reducirse los contagios y la declaración de semáforo verde en los municipios de la entidad, la coincidencia fue la escuela.

En el Día del Maestro faltará preguntar a los trabajadores de la educación si están conformes con la celebración de su Día, mismo que, desde una perspectiva social tiene que ser más que un día de asueto, porque reconocer el trabajo de los maestros implica entender la trascendencia de su actividad en bien del presente y el futuro del país y de las familias.

El Obispo de Ciudad Victoria, Monseñor Óscar Efraín Tamez Villarreal, dijo en ocasión de la celebración del Día del Maestro que, es quien se significa porque su presencia hace logra que los integrantes de la sociedad no solo de preparen en lo académico, sino que aprendan a ser responsables para que puedan vivir en libertad, dado que, la educación es eso, prepararse para el mañana y trascender en la vida, situación que siempre puede constatarse, porque los alumnos de hoy terminan por agradecer en el mañana las enseñanzas de sus maestros.

Dijo además que, nada es más gratificante para un maestro que encontrarse a sus alumnos dueños de su libertad de pensamiento y de sus conquistas profesionales.

En su tiempo, el Apóstol Pablo enseñó a los discípulos a aprender con alegría para predicar el Evangelio, dijo el Obispo de la Diócesis de Ciudad Victoria, cuándo ofició una misa para los maestros de la Universidad La Salle Victoria, y subrayó que Dios es el gran Maestro y que sus enseñanzas al pueblo que guio son el testimonio de que, en la verdad, la justicia, la libertad y la responsabilidad se puede descubrir la belleza que muchos no ven, pero, que, si conducen a ella.

Les dijo que la acción de los maestros trasciende en la sociedad, por eso, pidió que siempre Dios viva en los maestros.

Mario Gómez Monroy, Secretario de Educación en Tamaulipas llegó a un acuerdo con el Sindicato de maestros para que este lunes no haya clases ya que, el Día del Maestros cayó en domingo y a reclamo de sus derechos y según esto porque van muy bien en el desarrollo del ciclo lectivo, mismo que, al final de cuentas terminó de forma presencial, porque el efecto de la pandemia de COVID-19 disminuyó al haber menos contagios y eso abrió la posibilidad de que los alumnos y sus maestros estuviesen de nuevo en las aulas, algo que, a principios del año se veía poco probable por la magnitud que traía la pandemia

Ahora bien, que esperan los maestros en su día, la verdad, un buen aumento al salario con retroactivo al primero de enero de este año, en el entendido de que buen es del 10 por ciento para arriba, algo que nunca ha sucedido.

También esperan que de una vez por todas se definan los planes y programas de educación pública en todos los niveles, ya que, los criterios siguen sin unificarse. También quieren que les otorguen completos los apoyos que les corresponden y que, los premios por los años de servicio se entreguen completos.

También quieren que los directivos de las instituciones educativas cumplan con las expectativas de mejorar la infraestructura escolar y que haya armonía al interior de las instituciones, ya que, las confabulaciones de directivos y representantes sindicales terminan por favorecer a quienes menos merecen y dejar fuera de oportunidad a aquellos que cumplen al cien con su responsabilidad.

Que haya piso parejo para todos y que se acaben los cotos de poder a partir de esas malévolas fórmulas de confabulación dentro de las instituciones educativas de cualquier nivel.

Siempre será recordado en este Día del Maestro, el gran enseñante que fue don Juan Terrazas Molina, un apasionado de la educación que dedicó su vida a los alumnos y a la comunidad que sirvió siempre con un sentido positivo. Como padre de familia se le recuerda siempre.

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