Gaceta

Por: Raúl Terrazas Barraza

*Precampañas y alianzas deben esperar

Aunque las precampañas de los partidos políticos para elegir a sus candidatos a cargos de elección que se disputarán en las elecciones del seis de junio venidero, iniciaron hace unos días, la realidad es que, será hasta el mes de enero cuándo estas se noten, sobre todo porque los modelos usados por las dirigencia apuntan más a la designación que a la competencia interna.

Eso de que llevan a cabo encuestas que les permiten evaluar las preferencias de los militantes, genera inactividad al interior de las organizaciones políticas, más bien todos se quedan en espera de una definición cupular, situación que evidencia más cabildeo desde antes del inicio del período de precampañas, aunque deberán esperar que las semanas se consuman para que todo parezca un ejercicio llevado en atención a las pautas que da la Legislación Electoral del país y de las entidades.

Los aspirantes a cargos de elección popular y los dirigentes de los partidos están ciertos de que, cualquier cosa que hagan en los días que faltan para que termine el 2020, no son buenos para movilizarse en busca de respaldo ciudadano, es mejor esperar que brinque el año, para aparecer ante la militancia y simpatizantes.

A los dirigentes de los partidos políticos, les sirve muchos este tiempo de inactividad para repensar que harán respecto a varios puntos ligados al trabajo de las precampañas, entre los cuales destaca la autorización para que aquellos que ya están en los cargos públicos obtengan la autorización para reelegirse, ya que, esa opción establecida en la Constitución General de la República y las Leyes locales, no puede ni debe pasar desapercibida o dejarse de lado en un momento en el cual, los partidos quizá prefieran no arriesgar y competir con los mismos que ya ganaron en la elección reciente.

El gran inconveniente para responsables de partidos, sus prospectos nuevos y los que buscan reelegirse, es el silencio de los electores, porque saben del gran alcance que tiene su voto y quizá su uso permitan el florecimiento de los partidos de siempre, en virtud de que, la apuesta por los nuevos no deja buenos resultados.

Ese silencio es para los tres tipos de elección que habrá en Tamaulipas, Diputaciones Federales, presidencias municipales y diputaciones locales, por tanto quienes consideren que ya tienen las preferencias a su favor, podrían llevarse la sorpresa de su vida a la hora que los ciudadanos decidan a quien entregar su sufragio.

Craso error de los aspirantes a cargos de elección popular, es convertir las presuntas preferencias electorales en intención del voto, porque al menos en Tamaulipas el razonamiento del voto funcionará de nuevo en el 2021, de la misma forma que sucedió en el 2016, cuándo resolvieron votar a favor del proyecto del PAN y sacar al PRI de la jugada para la gubernatura, el Congreso del Estado y los Ayuntamientos.

Después hicieron creer que respaldarían el proyecto del partido en el poder federal, cuándo el cambio de Diputados en el Congreso del Estado y el PAN volvió a la carga con una gran lección en las urnas.

No puede decirse lo mismo del 2018, porque el efecto que surtió la tercera candidatura del propietario el Partido Movimiento de Regeneración Nacional, hizo que se ganarán una buena parte de las diputaciones locales y las Senadurías, porque se dio el fenómeno de voto en cascada, es decir, votaron por el candidato presidencial del PMRN y lo hicieron por el resto de los candidatos.

Al año siguiente los regeneracionistas alardearon que obtendrían la mayoría del Congreso el Estado, porque traían todo el vuelo del mundo del 2018, pero, no les alcanzó, porque los panistas se armaron con todo y evitaron la llegada de la izquierda, de tal forma que solo logaron ganar una Diputación de mayoría, correspondiente a la Ciudad de Matamoros.

Además, se supone que el PAN, con la dirigencia en manos de Luis Cantú Galván, ha trabajado las bases e impedido que la corriente neoizquerdista se amplíe y va por la recuperación de los Distritos Federales Electorales que se perdieron en la elección del 2018, los dos de Reynosa, que ganaron Olga Juliana Elizondo Garza y Armando Zertuche Zuani por el Partido del Trabajo, coaligado al PMRN y Tampico que ganó Olga Sosa Ruiz que fue postulada desde el Partido Encuentro Social.

Los otros que tienen que recuperar son los que ganaron Héctor Joel Villegas González y Adriana Lozano Rodríguez, Río Bravo y Matamoros de forma respectiva, así como, Madero que se llevó el ex priista Erasmo González Robledo, quien, dicho sea de paso es a quien mejor le salen las cosas en los últimos tiempos, porque se quedó con la Comisión de Presupuesto y se la jugó con el actual dirigente del comité nacional de Regeneración Mario Delgado Carrillo.

El PAN se había quedado con tres de los nueve Distritos, es decir, el 30 por ciento de la elección de 2018, porque ganaron José Salvador Rosas Quintanilla en Nuevo Laredo, Vicente Verástegui Ostos en Mante y mediante coalición con el Partido Movimiento Ciudadano, Victoria, por donde postularon a Mario Ramos Tamez, quien al final de cuentas dejo el partido que maneja el matamorense Gustavo Cárdenas Gutiérrez para quedarse con el PAN, porque según esto los del color naranja ya no tienen futuro, sin embargo, meses después irse a PAN, ahora resulta que el Diputado de Victoria quiere que le autoricen la reelección, cuando en realidad la intención del comité de Luis Cantú Galván, tiene otro tipo de proyecto.

Ahora bien, en el mapa de la coalición que formaron el PRI, PAN y PRD para las diputaciones federales, no aparece Tamaulipas, por tanto, las candidaturas para los nueve distritos, se definirán de manera individual y es allí cuando las manifestaciones de reelección pueden tener una respuesta negativa de la dirigencia del PAN.

Delos 300 Distritos Federales Electorales, sin alianza con 129 y con alianza 171. Además de Tamaulipas no entran en la postulación aliada Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Jalisco, Morelos, Oaxaca, Querétaro y Yucatán, así que, es de esperarse que las precampañas se vean a partir de la segunda semana de enero en estas nueve entidades del país.