Hay una grave crisis en el sector ganadero de Tamaulipas donde no escapa Soto la Marina, debido ante la intensa sequía que se viene registrando y que trae como consecuencia la baja de peso de los hatos ganaderos, que ya ha provocado la muerte de animales, porque definitivamente no es lo mismo alimentarlos con pastas, que mantenerlos con forraje y suplementos, además de que hay productores que no pueden sufragar esos gastos.
La situación en este importante sector productivo es mucho más grave de lo pudiera pensarse, porque no hay pronósticos de que en los próximos meses vayan a presentarse precipitaciones pluviales y las pequeñas presas y represas de los ranchos están secas y no hay dinero que aguante para tratar de mantener con buen peso al ganado y de esta manera no tener pérdidas en la comercialización, razón por la cual pequeños ganaderos están viendo reducidos sus pequeños hatos ante la muerte de sus animales, que de manera oficial aún no se han cuantificado, pero por voz de los mismos productores, se sabe que si está sucediendo.
Esta sequía que mantiene alarmado al sector ganadero ha provocado que en algunos casos los productores estén vendiendo sus “vacas flacas” para evitar que mueran de sed y hambre, a lo que se suma el bajísimo precio en que se está comprando el ganado, particularmente el que se comercializa dentro del mercado nacional.
